Qué cortos se me han hecho los días de descanso que he pasado con mis niñas y amigos en un sitio tan espectacular como este. Al borde del río Teverga y recorriendo la Senda del Oso, he disfrutado como un enano y se me ha hecho corto, corto…
Adoro Asturias, sus gentes y sus lugares. Y su comida también…